Los tiempos han cambiado y ser empleado público ya no parece ser la opción más atractiva de los estudiantes que acaban de terminar sus estudios.
Atraer nuevo talento y retener el existente se ha convertido en uno de los grandes desafíos de los gestores de personas en las Administraciones Públicas.
Pero no es el único, a eso hay que sumarle una larga lista: la elaboración de RPT adaptadas a los nuevos retos, la motivación, el envejecimiento de las plantillas, la redefinición de procesos selectivos, el teletrabajo, la igualdad de género, la dirección pública profesional….